La provincia de Córdoba vive una situación crítica con incendios forestales activos y cuatro sismos que sacudieron la región en menos de dos días. Las altas temperaturas agravaron la situación, aunque se espera un alivio en las próximas horas.
Córdoba atraviesa un escenario preocupante con incendios forestales que continúan fuera de control, sumados a la sorpresa de cuatro movimientos sísmicos que ocurrieron en un lapso de 48 horas. Las temperaturas extremas del lunes, con máximas que llegaron a los 40 grados, complicaron el trabajo de los bomberos, aunque el pronóstico de un descenso térmico a 26 grados para este martes trae cierta esperanza.
Incendios forestales fuera de control
Los incendios en Córdoba llevan semanas, y la situación ha mantenido a los bomberos y brigadistas en alerta constante. Este lunes, el foco más crítico se localizó en la Quebrada de la Mermela, una zona de difícil acceso donde más de 150 bomberos voluntarios trabajaron incansablemente durante la noche. Según el Gobierno de Córdoba, los esfuerzos incluyeron el despliegue de personal del ETAC, el Plan Provincial y el Plan Nacional de Manejo del Fuego, con el apoyo de tres aviones hidrantes y tres helicópteros.
A pesar del esfuerzo, las altas temperaturas y la baja humedad generaron condiciones propicias para que los incendios se reactivaran en algunos sectores. Sin embargo, con la llegada de un frente frío este martes, se espera que las temperaturas más bajas faciliten el control de las llamas.
Sismos sorprendentes en medio de la crisis
Como si los incendios no fueran suficiente desafío, Córdoba también ha experimentado cuatro sismos en menos de 48 horas, lo que ha generado preocupación entre los habitantes. Según el Instituto Nacional de Prevención Sísmica, el primer temblor se registró el domingo por la mañana con una magnitud de 2.9, mientras que el más fuerte ocurrió esa misma noche con una magnitud de 3.2. El lunes por la madrugada y la tarde-noche se reportaron otros dos sismos de 2.6 y 3.1, respectivamente.
A pesar de la frecuencia de los sismos, el Instituto los catalogó como de "intensidad débil" o "muy débil", lo que significa que solo algunas personas en reposo lograron percibirlos. Afortunadamente, no se reportaron daños materiales ni heridos, pero la secuencia sísmica ha añadido un nuevo factor de tensión a una provincia ya agobiada por los incendios.
Córdoba enfrenta una combinación de crisis naturales que pone a prueba la resiliencia de sus habitantes y la capacidad de respuesta de las autoridades. La situación de los incendios forestales, que lleva semanas afectando vastas zonas de la provincia, se agrava con la sorpresa de los sismos, recordándonos la vulnerabilidad que tenemos frente a la naturaleza.
Comments