Múltiples explosiones de beepers utilizados por Hezbollah dejan al menos nueve muertos y miles de heridos
El Líbano y Siria han sido escenario de una serie de explosiones relacionadas con beepers usados por miembros de Hezbollah, incluidos combatientes y personal médico. El saldo hasta el momento es de al menos nueve personas fallecidas y 2.750 heridos. Los dispositivos explotaron en distintos puntos del Líbano y Siria, generando caos y preocupación entre los habitantes.
¿Cuándo y dónde ocurrieron las explosiones?
Las detonaciones comenzaron alrededor de las 15:30 (hora local) en el sur del Líbano, específicamente en los suburbios de Beirut conocidos como Dahiyeh y en el valle de la Bekaa. Las explosiones se extendieron durante casi una hora y algunas ocurrieron justo después de que los dueños escucharan el sonido de los beepers, lo que los llevó a manipularlos para leer los mensajes en pantalla.
¿Qué dispositivos explotaron?
Los beepers destruidos coincidían con el formato de los fabricados por la compañía taiwanesa Gold Apollo, aunque la empresa ha negado cualquier vinculación. Estos dispositivos fueron adoptados recientemente por Hezbollah como una forma de comunicación de baja tecnología para evitar el rastreo israelí. Fuentes de seguridad indicaron que los beepers eran el último modelo introducido por el grupo en los últimos meses.
¿Qué causó las explosiones?
Aunque se investiga un posible sobrecalentamiento de las baterías, los expertos no creen que esta sea la única causa. Se barajan hipótesis como la intervención de fuerzas de inteligencia israelíes, que en el pasado han utilizado explosivos en teléfonos para atacar a sus enemigos. También se estudia la posibilidad de que hackers hayan introducido malware en los dispositivos, provocando su mal funcionamiento y posterior explosión.
Situación en los hospitales
El sistema de salud se encuentra desbordado, con heridos siendo atendidos en estacionamientos de hospitales y sobre colchones en el suelo. En los suburbios de Beirut, uno de los bastiones de Hezbollah, los ciudadanos están acudiendo a donar sangre mientras los médicos atienden a los afectados en camillas improvisadas y vehículos.
Las explosiones de los beepers de Hezbollah ponen de manifiesto la vulnerabilidad de la tecnología, incluso cuando se busca evitar el monitoreo externo. Este trágico evento no solo tiene repercusiones en el campo de batalla, sino también en la vida de cientos de civiles que han resultado heridos. Las tensiones en la región siguen en aumento, y este incidente podría tener consecuencias geopolíticas de gran alcance.
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